Este patrón vibrante, presenta grandes flores intrincadamente diseñadas en tonalidades de rosa, púrpura, naranja y amarillo. Estas flores se entrelazan con hojas verdes, creando una mezcla armoniosa de colores que evoca la frescura de la naturaleza.
El diseño exhibe una simetría cautivadora, con las flores y hojas repitiéndose de manera consistente a lo largo del lienzo, lo que aporta equilibrio y dinamismo a la obra. Esta composición no solo resalta la belleza de cada elemento, sino que también invita al espectador a sumergirse en un mundo floral lleno de vida y color.